La telenovela del Apagón, tiene un nuevo capítulo. Ante la negativa del PRI de apoyar a Televisa y al senador Javier Lozano para prorrogar la fecha,  los mismos senadores, dirigidos por Roberto Gil del PAN vuelven a la carga para aplazar el apagón a televisoras chicas y públicas, aquellas que aún no han podido cambiar sus equipos por digitales. Lo que estamos viendo es un proceso atropellado que fue aprobado por el senado y hoy los mismo senadores que aplaudieron y dieron su visto bueno, buscan una prorróga.  Lo que falta es información de las autoridades de la SCT y el IFT  sobre la entrega de televisores, el número de personas que va a quedar sin señal, en que regiones no habrá señal. Para Irene Levy, presidenta de Observatel, no se vale modificar leyes cuando los concesionarios no cumplen con los tiempos.  

 

Varias personas me aseguran que la televisión abierta no es negocio, se requiere de una inversión fuerte, al menos 1,800 millones de pesos para ganar la licitación de una de las dos cadenas ofertadas, me refiero a Cadena Imagen 3, de Olegario Vázquez Aldir que pagó eso más una inversión de 10 mil millones de pesos en equiparse y adquirir contenidos. La nueva televisión va por una rebanada del pastel publicitario y eso se logra con contenidos atractivos y novedosos para atraer a los televidentes, pero según cálculos del Instituto Federal de Telecomunicaciones, esto se lograra cerca del año diez de operación de la nueva cadena. 


También se menciona que la Televisión abierta está perdiendo ante otras plataformas como la TV de paga, vía cable o satélite, el streaming como Netflix, o YouTube. En los Estados Unidos los televidentes están cortando el cable por una televisión por internet. El canal de Disney por cable ha perdido 4 millones de suscriptores desde hace dos años, ESPN también ha restado 7 millones de suscriptores en el mismo período, según datos de CNNMoney.  Las grandes empresas de cable pierden suscriptores, los estadounidenses prefieren un buen internet conectado a un Apple TV o una SmartTV


En México el abaratamiento de los paquetes de cable y de tv por satélite permiten pagar 140 pesos mensuales por una señal de calidad. Hoy con el cambio a la televisión digital se espera una caída en el número de suscriptores de tv de paga, no será necesario un cable para ver la televisión nacional, esta llegará de forma nítida en HD y con audio digital de cinco canales y medio con el empleo de una sencilla antena.


A los que me dicen que la tv abierta no es negocio les digo que hay que revisar lo que está haciendo Televisa ante la llegada de la competencia.
Retirará del aire el programa de Laura, tema que es blanco de críticas a la televisora por su contenido que deforma y denigra. Televisa no se deshace de la señorita Laura,  la deja como artista exclusiva, no se podrá ser contratada por otra televisora. 

Laura sale del aire

Televisa corrió su franja “AAA” a partir de las 4 de la tarde, con lo que cobrará más desde temprano a sus anunciantes y logró una carambola de tres bandas al conseguir que la Secretaría de Gobernación ampliara la clasificación de contenidos que prohibía anuncios de 4 a 7 de la tarde, ahora los podrá incluir en su programación desde esa hora.  

 

La televisora de Chapultepec 18 refuerza su programación, cierra el ciclo de Chabelo que tenía 48 años al aire y era el única programa que el amigo de los niños comercializaba y pagaba el tiempo aire. Pareciera que lo que es motivo de críticas y lo que no le funciona a Televisa va para afuera, tal y como lo hizo hace unas semanas TVAzteca. A esto se agrega un bono por mil 200 millones de pesos, emitido por Televisa para apuntalar sus operaciones de cable y telecomunicaciones. 


La Televisión no es como antes la reina de los medios de comunicación hoy ante la competencia de medios digitales y convergentes la tele se tiene que reinventar, es tiempo de retos, pero el negocio sigue estando ahí, tan fuerte como antes.  

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